Descripción
El conjunto monumental de San Luis de los Franceses, antiguo noviciado de la Compañía de Jesús, fue construido por el arquitecto Leonardo de Figueroa entre 1699 y 1731 con la intención de despertar la capacidad de asombro de quien entra por primera vez en el templo: puro artificio barroco que suspendiera la razón para embotar los sentidos con una apabullante panoplia artística que conmoviera a los fieles. Tras la expulsión de los Jesuitas ha sido seminario, convento franciscano, hospital de venerables, fábrica en siglo XIX, hospicio y a principios del siglo XX, ya desacralizado, escenario para representaciones como Don Juan Tenorio.
A día de hoy podemos contemplar la magnificencia barroca de su iglesia, ornada de retablos dedicados a los principales santos de la Compañía; la espectacular y no menos decorada capilla doméstica, y su intrigante cripta. Tras años de espera, asistimos al acrecentamiento del espacio visitable con el patrimonio artístico que custodia la Diputación de Sevilla, proveniente de los antiguos hospitales de Sevilla: el de San Lázaro, San Hermenegildo, las Cinco Llagas, Patriarca Señor San José o Casa Cuna, o el propio Hospicio de San Luis de los Franceses.
Recorreremos la historia de estas fundaciones a través de las pinturas y algunas esculturas que decoraban sus espacios, y conoceremos la importancia que en estos hospitales concedían no solo a la medicina para el cuerpo, sino al consuelo para el alma, necesario en una sociedad donde la muerte estaba presente a cada paso.